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miércoles, 30 de abril de 2025

El apagón y la radio del abuelo

Por Javy

En el taller, bajo la luz tenue de una lámpara de queroseno, la radio del abuelo descansaba sobre la mesa, rodeada de herramientas y cables. El apagón llevaba horas en todo el país, y el silencio eléctrico pesaba en el pueblo. Don Elías, con sus manos nudosas, acarició el dial como si despertara un viejo amigo. Esto no es solo una radio, dijo, es memoria, conexión.

La comunidad se apiñaba ansiosa. Sin internet ni teléfono, el mundo exterior se había desvanecido. Pero una radio de los años 60, prometía traer voces lejanas. Elías desarmó la carcasa de madera, revelando válvulas polvorientas y cables desgastados. Paciencia, murmuró, mientras reparaba un condensador dañado, rescatado de otra reliquia. Los vecinos, siguiendo el espíritu del taller, aportaban: una pila artesanal, un cable reciclado, incluso un tornillo suelto.

Tras horas de trabajo colectivo, un chasquido rompió el silencio. Elías giró el dial, y entre estática, una voz emergió: noticias de la capital, música, esperanza. Los rostros se iluminaron; la radio no solo informaba, sino que unía. Era el eco de los viejos tiempos, cuando el abuelo narraba historias al son de boleros. Ahora, en la penumbra, volvía a ser el corazón del hogar.

El taller enseñaba que arreglar no era solo reparar objetos, sino tejer comunidad. La radio del abuelo, rescatada del olvido, demostró que lo viejo podía ser vital. Mientras la señal crepitaba, los vecinos planearon el próximo encuentro: más reparaciones, más historias. En un mundo desconectado, esa radio, como el taller, era un faro. Y Elías, sonriendo, susurró: Aún funciona. Siempre lo hará.

IA: Grok

2 comentarios:

  1. Una preciosidad de historia basada en un hecho insólito que no pensábamos vivir. La radio fue la protagonista.
    Un abrazo Javier

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    Respuestas
    1. Espero que este apagón cambie algunas cosas.
      Besitos 😘

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